El pasado Jueves 24 de Noviembre, estudiantes de Pedagogía en
conjunto a compañeros de otras carreras, marcharon pacíficamente hacia el
Ministerio de Educación para hacer entrega a las autoridades de un
documento que contempla solucionar las medidas mal tomadas y las
cláusulas incorrectamente aplicadas en el proyecto de la Beca Vocación de Profesor, para así construir un digno beneficio para quienes serán
la base de la enseñanza en el futuro.
DOCUMENTO DE ANÁLISIS Y PROPUESTAS PARA LA BECA VOCACIÓN DE PROFESOR
1 ¿De qué hablamos realmente, de una beca o de un crédito?
De entre todas las becas ofrecidas por el Mineduc, la llamada
“Beca Vocación de Profesor” (BVP) estipula condiciones tan particulares que no
parece ser realmente una beca. Según la
RAE, una “beca” es una “subvención para realizar estudios o
investigaciones”. Pero de acuerdo a la propia información entregada por el
Mineduc, vemos que la BVP
no se asemeja a aquella definición, sino a esta: “cantidad de dinero, o cosa
equivalente, que alguien debe a una persona o entidad, y que el acreedor tiene
derecho a exigir y cobrar”. Tal definición corresponde a un “crédito”.
Al recibir cualquiera de las becas del Mineduc, los beneficiarios
firmamos una declaración jurada en la que se asume el compromiso de respetar
variadas cláusulas. Esto significa que al infringir alguna de las cláusulas el
alumno beneficiado pierde la beca, es decir, pierde la subvención que le
permite aliviar la carga monetaria que implican los aranceles, debiendo
encargarse de sus gastos universitarios futuros él mismo.
Con lo anterior estamos familiarizados porque es así como las
becas funcionan. Sin embargo, las obligaciones que impone la BVP van más allá. Además de la
declaración jurada, nosotros debemos firmar un pagaré, lo que nos deja en
calidad de deudores. Así, nos transformamos en estudiantes endeudados, tal cual
como si hubiésemos solicitado un crédito. El pagaré determina, por ejemplo, que
si un estudiante terminó su carrera de pedagogía, pero por razones eventuales
no le es posible ejercer de profesor 30 horas a la semana, sino que sólo 28,
éste deberá pagar la totalidad del arancel de su carrera, es decir, desde ese
momento deberá comenzar a pagar su crédito. ¿Cuán probable es que un profesor
de filosofía o música pueda ejercer las mismas 30 horas a la semana que un
profesor de matemáticas o lenguaje? El documento también determina que si un
estudiante abandona su carrera en la mitad, éste deberá pagar de manera
inmediata la totalidad de los años cursados. ¿Cómo es que un estudiante que no
se ha podido titular va a obtener los recursos para pagar esa deuda?
El beneficio que ofrece la BVP es una posibilidad a futuro: lo que se nos
ofrece es la anulación de la deuda únicamente en el caso de que se cumplan
todas las condiciones descritas propias de la BVP y del DS 337, condiciones que no sólo
reglamentan nuestra estadía en la universidad, como el común de las becas, sino
que también nuestras condiciones laborales durante los 3 años posteriores.
Nos parece inapropiado que las circunstancias futuras, el
destino o el azar, sea lo que determine si debemos pagar o no la carrera, si
debemos pagar la deuda del crédito o ésta se anulará transformándose en una
verdadera beca. Nadie sabe si al optar por la BVP podrá cumplir cabalmente con las condiciones
que se establecen, por lo que nadie debería postular sin tener el dinero para
pagar la totalidad del arancel correspondiente a la carrera que eligió.
El nombre “Crédito Vocación de Profesor con Posibilidades de
Convertirse en Beca” es más representativo del beneficio en cuestión, pero es un nombre largo, ridículo y no posee el espíritu de un
“Chile que se la juega por ti” -como lo presenta el eslogan publicitario-, por
lo que más que ajustar significados y conceptos, creemos urgente e
imprescindible cambiar las condiciones bajo las cuales se pretende subvenir a
los estudiantes que se lo merecen, que optaron estudiar pedagogía asumiendo un
compromiso con el país y conociendo de antemano las exiguas condiciones
laborales en que se encuentra el profesorado
2. La propaganda empleada y la percepción ciudadana.
El Ministerio de Educación al lanzar la campaña
oficial de la Beca
Vocación de Profesor en Noviembre del 2010, destacó los
compromisos primordiales que debía cumplir el estudiante para hacer válida esta
beca y enfatizó en la gratuidad de los estudios de quienes accedieran a este
beneficio.
La campaña empleada no cumplió
con su función elemental, la cual es informar en su totalidad lo que conlleva
esta beca. Acentuó la información en los beneficios, requisitos para postular y
compromisos que el estudiante debía cumplir, sin embargo en ningún momento
mencionó la información correspondiente a los documentos que se debían firmar,
omitiendo de manera abrupta los términos que rigen el pagaré firmado.
El Ministerio de Educación como ente creador y principal fuente de este
proyecto, debía contemplar la totalidad de la información con respecto a este
beneficio. Debía mencionar los términos correspondientes a este beneficio, los
compromisos que debía cumplir el estudiante, sin embargo nada de esto se
encontraba ni se encuentra aún en la información que se proporciona, haciendo
que la obtención de este beneficio no se haga en sus reales condiciones, o sea
que el beneficiado no sea consciente de la totalidad de los términos hasta el momento
en que deba firmar el pagaré requerido para hacer válida la beca.
Esta simple omisión de condiciones, implicó que el estudiante no optase
por la beca real sino por la beca planteada por los medios, la cual discrepa
con las cláusulas presentadas en el pagaré, cláusulas que no tienen sustento
frente al concepto de beca percibido por la ciudadanía en su conjunto.
Para avalar lo antes expuesto realizamos un
estudio a un número becados con el fin de recabar información respecto a la
percepción que tienen los propios beneficiados por la Beca Vocación de
Profesor. Los resultados expuestos comprueban que el 74% (1) de los encuestados no tuvo conocimiento de la totalidad de las
condiciones de este contrato antes de firmar los documentos correspondientes, a
lo que podemos decir que la difusión comunicacional no fue específicamente la
más oportuna para informarse respecto este beneficio. Aún más preocupante es
que a través de esta encuesta se corrobora que el 90% (2)
de los encuestados no entendió lo que firmó dado el lenguaje empleado, sin embargo aun así firmaron los documentos, entendiendo que
se encontraban en una situación en la cual ya no podían optar por otra beca,
dado que los plazos para postular a otro beneficio ya habían caducado.
Tras estos resultados cabe preguntarse en qué momento el beneficiado
pensó en convertirse en deudor al momento de optar por esta “beca”.
……………………………………………………………………………………………….
(1) Gráfico
3.
(2) Grafico
11 .
3. A qué se
apela con Vocación
En contraste con la evidencia de la crisis actual del estatuto docente,
el Ministerio de Educación ha orientado la Beca Vocación de
Profesor a mejorar la insuficiente calidad de los profesores, y pretende, en
consecuencia, mejorar el futuro de la educación chilena.
El incentivo de la BVP
apunta a esconder la contradicción que genera dentro del sistema educacional
actual el hecho de que los puntajes PSU que ingresan a carreras de pedagogía
son bajos. ¿No deberían ser los mejores estudiantes quienes se preparen para
educar a las generaciones futuras? Sin duda que así debería ser. Sin embargo,
entendemos que no suceda así al tener en cuenta las condiciones que el mercado
impone a la labor docente como lo son las bajas remuneraciones y las condiciones
deplorables en las que deben desarrollar su trabajo como docentes.
El
Mineduc propone: si tienes vocación y obtienes más de 600 puntos PSU, puedes
acceder a la BVP. Es
decir, los estudiantes con vocación y rendimiento PSU excepcional tendrán un
incentivo económico para dedicarse a la pedagogía. (3)
La
vocación no es algo que se mida previo a la obtención de la BVP. Se apela a ella con
bombos y platillos, pero lo cierto es que no es una condición necesaria para
obtener el beneficio. El Mineduc no se encarga de medir la vocación, porque
evidentemente no es algo que se pueda medir en una prueba ni en un estudio a
corto plazo. Esto no quiere decir que todos quienes optan por la BVP no tienen vocación. Sólo
es evidencia de que el Mineduc promueve la pedagogía a través de un incentivo
monetario, mintiendo y dejando de lado la importancia de la vocación. (4)
Dicho lo
anterior, creemos que la BVP fuerza a los estudiantes a
elegir áreas de estudio considerando el bajo costo que podría resultar de esta
beca, tomando en cuenta el bienestar futuro de sus intereses reales de
desarrollo profesional y personal. Creemos que esto es evidente al tener en
cuenta el altísimo costo de los aranceles universitarios. Es evidente también
tener en cuenta, por ejemplo, a la hija de un trabajador con un sueldo que
supera escasamente el sueldo mínimo ¿Tiene ella la libertad de elegir entre
estudiar una carrera pedagógica que podría resultar casi gratuita o estudiar
otra que cuesta dos tercios del sueldo que gana su padre? Sin duda no hay
elección posible, sino un imperativo forzado por el dinero.
De esta
lógica de condicionar el futuro de un estudiante con un incentivo monetario, es
difícil esperar buenos frutos. La solución al problema docente no tolera
parches de contenido, sino una solución de forma. La base de la BVP es la PSU,
una prueba ampliamente cuestionada por filtrar indirectamente el acceso a la
universidad de acuerdo a clases socio-económicas. Por lo que quizá, ante estas dificultades,
más valdría generar las condiciones para que el trabajo de profesor pueda ser
realizado con las herramientas y en las condiciones adecuadas para recién así
obtener frutos maduros.
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(3) Gráfico 6.
(4) Gráfico 7.
4.
Propuestas concretas e interrogantes
-
La heredabilidad de una deuda generada por la BVP es realmente un punto
escandaloso por la propia naturaleza de una beca. Por ello, comprendemos la
pronta reacción que tuvo el Mineduc ante nuestra manifestación del día 12 de
agosto, al reconocer la responsabilidad que les compete acerca de lo que
calificaron como un error, y al comprometerse a anular la cláusula en cuestión.
Sin embargo no es aceptable el argumento de que
esta irregularidad se produjo por la utilización de un pagaré tipo considerando
que en ninguna beca se debe firmar algún documento similar a éste y con
tales características.
La
gravedad de esta negligencia se puede dimensionar al proyectar las
consecuencias que pudo haber tenido en el futuro, de no ser por la protesta que
llevamos a cabo. Es por ello que creemos necesario que el Ministerio se haga
responsable no sólo de reconocer su error, sino también de dar a conocer de
manera pública y amplia el método y el plazo para hacer efectiva la anulación
de esta cláusula, considerando que ésta se encuentra plasmada en el pagaré que
el mismo Ministerio nos hizo firmar.
- En el
pagaré firmado, que se nos cataloga de deudores, se exige la devolución del
dinero en caso de
retirase de la carrera, apelando que el estudiante no tiene vocación y hay que
reinvertir dichos recursos en nuevos talentos. Si un estudiante se ve en la
obligación de abandonar la Universidad es necesario considerando
que existen variables, que pueden ir más allá de la vocación, a saber, económicas, sociales,
emocionales y físicas, que podrían
determinar la situación de que éste no
siga estudiando
Consideramos de suma
importancia que al momento de exigir el cobro inmediato total del pagaré, como
si fuera de plazo vencido y sin ulterior recurso, se consideren las variables
que causan realmente el abandono de la carrera universitaria y no se apele a un
tema meramente vocacional ya que tal actuar comprueba que no se tiene una
visión realista de las condiciones en las que se vive en este país.
Enfatizamos en este punto
puesto que hay estudiantes que se encuentren en estas situaciones y de no
producirse un cambio se verán seriamente afectados.
De igual manera es necesario que se modifique el tiempo que tiene el
estudiante para devolver los recursos invertidos si éste pierde el beneficio
tomando en cuenta que los argumento expuestos con anterioridad(5)
- “Cualquier derecho, gasto o impuesto
que devenga de este pagaré, sus modificación, pago u otra circunstancia
relativa a aquel, o producida con ocasión del mismo, será de mi exclusivo
cargo”. La frase anterior contempla una
de las cláusulas del pagaré, en la cual se especifica que el estudiante debe
pagar un cierto monto, pero no se señala la cantidad requerida ni en qué plazo
debe ser cobrada, haciendo que la gratuidad total de la beca se vea anulada
frente a los pagos posteriores requeridos por el pagaré, independiente si el
estudiante pierde o no el beneficio.
- Consideramos que este beneficio no se debiese presente
como una beca sino que como un crédito que se traducirá en una beca en la medida que se cumplan con
las condiciones y cláusulas presentes en los pagarés firmados por los
estudiantes y así esclarecer públicamente
en qué consiste, verdaderamente, este beneficio
-Tanto la información a los medios de comunicación como a las propias
instituciones de educación superior no fue entregada correctamente, ya que cada
institución, literalmente, al no tener más información que la que contemplaba
la página web del Ministerio, actuó de acuerdo a sus propios criterios.
Dependía de la Universidad a la que el estudiante ingresaba si se veía más o
menos perjudicado con este beneficio. Con esto no pretendemos culpar a las
casas de estudios, sino que responsabilizamos al Ministerio de Educación por no
entregar la información adecuada y transparente a todas las instituciones, para
que éstas actuasen de igual manera frente a los estudiantes, tomando en cuenta
que el 2011 era el primer año de la implementación de este beneficio.
Así mismo era responsabilidad del Ministerio aclarar transversalmente
que esta beca, al momento de firmarla, aun no estaba regulada y por ende los
recursos correspondientes se recibirían solo cuando Contraloría General de la
República aprobará dicho proyecto y así no dejar en la incertidumbre tanto a
las Universidades, al no recibir los recursos correspondientes por cada
estudiante ,y a los estudiantes al no saber realmente qué fue lo que firmaron
ya que el decreto, que regula la BVP, no estaba publicado y por ende no existió
tal documento hasta Junio del 2011, tres meses después de que los estudiantes
firmaron la beca.(6)
-Esta beca está sostenida al decreto 39, en el cual no se encuentra la información que sustenta
la entrega de $80.000 mensuales a todos los estudiantes que ponderen más de 700
puntos en la PSU. La entrega de la cuota
antes mencionada no ha sido regular. La información dada decía que el monto
sería entregado de manera mensual los últimos días hábiles de cada mes
retirables en el Banco del Estado con los datos requeridos, pero aun los
estudiantes de licenciatura no han recibido el dinero y los estudiantes de primer año han tenido problemas al momento
de reclamar la cuota señalada, por esto
exigimos al Ministerio la regularización
de la entrega oportuna de estos
recursos y que se regule vía decreto
-El Ministerio de
Educación será el responsable de velar por el cumplimiento y control de los
compromisos adquiridos por el estudiante. Nosotros como estudiantes exigimos
saber concretamente de qué manera el Ministerio velará y controlará el
cumplimiento de nuestro compromiso ya que en ningún momento se especifica cómo
se llevara a cabo.
-Catalogamos de escandalosa la posibilidad de que esta beca se suspenda en
algunas Universidades tras las manifestaciones y paros estudiantiles ocurridos
este año, considerando que las consecuencias que acarrearían los estudiantes
becados serían fatales para su permanencia en la educación superior, ya que
deberán cancelar el año cursado con esta beca, por una situación que escapa a
sus manos. Así mismo no tendrán la posibilidad de acceder a otras beca puesto
que éstas se entregan solamente en primer año, lo que conllevaría que, en más
de un caso, el estudiante deba abandonar
la universidad y consigo la deuda del año cursado.
Sí los estudiantes firmaron un documento que los compromete a terminar
su carrera de pedagogía, el Ministerio de Educación debe comprometerse de igual
manera a que este compromiso sea posible de efectuarse y comprometerse a que el beneficio sea
entregado al estudiante los años
requeridos por éste.Exigimos
que a partir del próximo año, tras los sucesos acontecidos, se incorpore una
cláusula en la que se mencione que independiente de los problemas internos que
susciten a la Universidad en la cual permanece el alumno, este beneficio se
siga entregando, considerando las desventajosas consecuencias que conlleva
perder estos recursos por razones que no les competen en forma individual a
cada estudiante.
…………………………………………………………………………………………………
(5) Pág. 1, parrafo 3
(6) Gráfico 5
5. Irregularidades en
el caso de las Licenciaturas
En relación a los
beneficiados con la Beca Vocación de Profesor que se encuentran en
el último año de Licenciatura ha surgido la interrogante y moción, tras un
sinnúmero de irregularidades, de si esta beca fue creada principalmente para
estudiantes de primer año de pedagogía, y aplicada de manera irregular e
ilógica a los estudiantes de Licenciatura, ya que se presentan situaciones que
no se mencionaron con anticipación y que a su vez no tiene cabida en la
realidad de las propias Universidades, las cuales pasaremos a
detallar.
- El Ministerio
de Educación dio la libertad a todo estudiante que quisiese, a postular a este
beneficio con un puntaje mínimo de 600, lo cual es un requisito base para ingresar a la mayoría
de las Universidades del CRUCH, por ende un altísimo número de estudiantes que
postulasen tendrían un cupo y recibiría el beneficio.
Sin embargo, los departamentos que imparten pedagogía, lugar al que
deben pasar los estudiantes luego de terminar su licenciatura para obtener su
título de pedagogo, realizan otro tipo de evaluaciones. De hecho no todos los
estudiantes que postulan a estas unidades académicas finalmente ingresan ya que
las evaluaciones que se realizan se relacionan con una medición cuantitativa y
cualitativa a la vez, como lo son una entrevista personal, sus notas
universitarias y una prueba escrita, entre otros requisitos, dependiendo de la
Universidad. Tras una general descripción del proceso por el cual debe pasar un
estudiante para ingresar a la pedagogía, no cabe más que develar la nula
información y desinterés que tuvo el Ministerio de Educación para no tomar en
cuenta, al momento de entregar este beneficio, los problemas que conllevaría el
no analizar los protocolos que tienen las Universidades, en relación a los procesos
de selección de los estudiantes, y considerar sólo la PSU, que en la práctica
no sirve de nada al momento de ingresar a la pedagogía, luego de ya haber
cursado cuatro años de Licenciatura.
Es ilógico que se
pida el puntaje PSU a estudiantes que ya llevan, como mínimo, cuatro años en la
educación superior. Es que, luego de cuatro años de estudios universitarios
creemos tener más y mejores herramientas que se deben considerar. El puntaje
PSU es una medición que tiene por objetivo que los estudiantes egresados de
cuarto año medio puedan incorporarse a las mejores Universidades. Por
consiguiente los perfiles de los licenciados no corresponden a los que se
midieron hace cuatro años atrás y así mismo esta selección corresponde a un
proceso que se encuentra lejos de medir vocación.
Esperamos una respuesta
clara respecto de por qué se consideraron estas evaluaciones y no otras más
recientes, ya que por nuestra parte no encontramos razón coherente para dicha
medición. Debe existir alguna razón por la cual se privilegió dicha opción, de
la cual esperamos una explicación.
-Los principales
compromisos de esta beca son obtener el título de pedagogía y trabajar 1 o 2
años en un establecimiento municipal o subvencionado, sin embargo, en el caso
de las Licenciaturas el haber resultado beneficiado con la Beca Vocación de
Profesor no nos asegura un ingreso automático a los estudios pedagógicos, ya
que estos se realizan en una unidad académica que tiene sus propios métodos y
procesos de selección, mencionados anteriormente.
Es realmente
escandaloso que se entregue esta beca a personas que aún no tienen la certeza
de ser seleccionados para cursar los estudios pedagógicos, quedando fuera de su
alcance la decisión final. Sin embargo, serán ellos mismo quienes deban pagar
por las irregularidades cometidas desde el Ministerio de Educación.
No considerar los
protocolos expuestos en el punto anterior está llevando a las Instituciones a
adecuarse a las reglas de esta beca y por consecuencia bajar la calidad
construida por estos departamentos de estudio,
dada una inexistente regulación al respecto de parte del Ministerio de
Educación.
Exigimos una pronta
respuesta al respecto y una real regulación de las medidas que se han tomado ya
que los perjudicados directos serán los estudiantes, en especial los de
Licenciatura considerando que ellos deben postular este año a dichos
departamentos.
- En relación a los
pagarés firmados, queremos dejar la constancia y molestia de haber firmado dos
pagarés por errores del Ministerio, ya que en una primera instancia recibimos y
firmamos los documentos referentes a la BVP para estudiantes de primer año, que
posteriormente nos los cambiaron por los correspondientes a las Licenciaturas
Concordamos con los
estudiantes de primeros años respecto a que la información presentada en el
pagaré la conocimos solo al momento de firmar tal documento.
- Cuestionamos los
límites establecidos para cumplir con el compromiso firmado, debido
a que existe una diferencia proporcional en los plazos para estudiantes que entraron
a pedagogía a primer año, con un plazo máximo de 12 años y los estudiantes de
Licenciatura con un plazo de sólo 7 años.
A lo que apelamos es
que si fuesen equivalentes, estos últimos tendrían un plazo máximo de 9 años
para poder cumplir con los requisitos a los cuales nos comprometimos.
Estas diferencias son
producto, a nuestro entender, de que en el caso de la licenciatura se están
considerando los años de un estudiante que cursa la pedagogía en un año y por
ende trabaja un año en un establecimiento determinado. Solo en ese caso se
homologa el excedente de los años con el de los estudiantes de primer año, sin
embargo hay instituciones, en las cuales sus programas de estudios son de tres
semestres para titularse como pedagogo y por ende deben trabajar dos años más
en un establecimiento municipal o subvencionado, teniendo un excedente de solo
dos años, la mitad del que tienen los otros casos.
Independiente a que
antes de postular conocíamos los plazos establecidos para cumplir, consideramos
apropiado apelar a la modificación de los plazos en el caso de las
Licenciaturas ya que con un margen de dos años de excedente para cumplir el
compromiso, deja a los estudiantes vacilantes respecto a si alcanzan a cumplir
con los compromisos en el tiempo establecido ya que por una parte el ingreso a
los departamentos de pedagogía no precisamente puede ocurrir en el primer año y
por otra parte nadie asegura el encontrar trabajo de inmediato luego de
recibirnos, aun mas considerando
sectores de aprendizaje en los cuales ya existe una alta demanda
laboral.
A fin de cuentas
apelamos a esta modificación ya que es poco criterioso que un estudiante
que se excedió en un año en el compromiso deba pagar el total de la
deuda del pagaré ya que estos tiempos en ninguna medida se equiparan a la
vocación presente en el estudiante sino que son tiempos
administrativos que independientes de nuestra voluntad no los podemos
modificar.
6. Aportes de la Beca Vocación de
Profesor
Sin lugar a duda no podemos desconocer
los beneficios que nos ha traído esta beca, en el ámbito económico
principalmente, ya que de otra manera muchos de nosotros no podríamos haber
ingresado a la universidad o nos tendríamos que hacer endeudado con un crédito
universitario.
Así mismo valoramos que al anunciarse
este beneficio la percepción cuidada, respecto de la carrera docente y a la
importancia de los profesores en el desarrollo de la educación del país, cambio
y/o tomo mayor protagonismo del que había tenido en el pasado. Protagonismo que
entablo discusiones al respecto, que se habían desarrollado en innumerables
oportunidades, pero no acaparaban un interés ciudadano para su debate, dado que
no era un tema relevante y atractivo, y así mismo tampoco lo eran los
profesores y su labor en sí.
Bajo esa lógica podemos concebir un
aporte a la valoración docente, sin embargo no podemos dejar que estos logros
nos cieguen y no se reconozcan las falencias que este beneficio
conlleva.Falencias que, de no tener repare, involucrara cada año a más
estudiantes.
Llamamos a la entidad correspondiente a
tomar medidas de cambio ya que este proyecto toma gran protagonismo en el GANE.
Con este documento no pretendemos
desprestigiar la BVP, sino que pretendemos solucionar las medidas mal tomadas y
las cláusulas incorrectamente aplicadas en este proyecto, por el bien de
quienes ya tenemos este beneficio y de quienes asumirán este compromiso los
años siguientes.
Esperamos una pronta respuesta con soluciones
concretas al respecto para así construir un digno beneficio para quienes serán
la base de la enseñanza en el futuro.
Se
Despide
Beneficiados
con la Beca Vocación
de Profesor
Educación
Parvularia y Básica Inicial U.Chile
Licenciaturas en Ciencias Exactas U.Chile
Licenciaturas en Lengua y Literatura Hispana U.Chile
Licenciatura en Lengua y Literatura Inglesa U.Chile
Licenciatura en Historia U.Chile
Licenciatura en Filosofía U.Chile
Licenciatura
en Educación en Biología y Pedagogía en Biología UMCE
Pedagogía en Matemática
y Computación Usach
Pedagogía en
Castellano Usach
Pedagogía en
Ingles Usach